"Si no hablan de ti, no eres nadie."
- Blair Waldorf

1/7/12



“It’s like screaming and no one can hear. You almost feel ashamed that someone could be that important, that without them you feel like nothing. And they will never understand how much it hurts, you feel hopeless but nothing could save you. And when its over and its gone, you almost wish that you could have all that bad stuff back, so you could have her back.”

Borraba tu número de móvil varias veces. Reprimía esas ganas locas por verte todos los fines de semana,y aguantaba las risas tontitas cuando me enviabas un mensaje. Cuando sonaba el móvil, corría como si me fuese a morir. A veces no lo cogía, pero eso era solamente cuando me daban los arrebatos de quererme a mi misma.
Y hoy, recuerdo. Ya no solamente te tengo en el móvil, sino que me lo sé de memoria. Ahora tengo el triple de ganas de verte, pero te veo entre semana. Ahora no aguanto las risas tontitas, me salen solas. Ahora no me suena el móvil, me suena el telefonillo. Y ahora, no me dan arrebatos de quererme a mi misma, estoy en un continuo arrebato de quererte a ti.

17/5/12

y ya esta

Gente que no abre los ojos y no se da cuenta que no son el centro del mundo. Pero mira, yo paso, voy a pasar de todos y disfrutar con lo que realmente me hace feliz, que solo yo elijo que es, y que nadie decide por mi.

7/4/12

WTM

Llegamos a Meknés despues de un imprevisto en el camino. Una rueda se nos pinchó en medio de la carretera, pero supieron como arreglarlo en poco tiempo. Una vez instalados en el hotel cenamos y nos acostamos (o al menos eso es lo que acordamos con los profesores que haríamos) para descansar. Al día siguiente visitaríamos la gran ciudad de Fes, una de las cuatro ciudades imperiales.
22 de Marzo
Después de un delicioso desayuno de croissants y pasteles, marchamos hacia Fes. El trayecto era largo, pero nos entreteníamos mirando por la ventana a las personas.
Llegamos a la medina de Fes tras dos largas horas de camino, y nos recibió un guía llamado Mohamed. Mientras él nos iba guiando por la ciudad, nosotros hacíamos un montón de fotos. Ahí fue cuando me dí cuenta de como miran los hombres de allí a las mujeres extranjeras. No paran de mirarte y decirte <<ojos bonitos, ojos bonitos>>. Normal, pues la mayoría de mujeres de allí no enseñan ni los tobillos. Aunque, a decir verdad, había jovenes que vestían normal, con sus vaqueros y sus camisetas de manga corta. Pero muy pocas. A la hora de comer, tras haber visitado la tipica farmacia marroquí y los curtidores de cuero, nos dan a cada uno dos grandes trozos de pan. Es redondo y tierno, y huele de maravilla. Cogemos el bus y vamos hacia lo alto de la ciudad, hasta un castillo, para comernoslo en sus alrededores.
Después de comer estabamos haciéndonos fotos mis amigas y yo, cuando un chiquillo de apenas diez años se  acercó a nosotras a pedirnos agua y le dí mi botella. Le expliqué como pude que la necesitaba de vuelta para rellenarla y pareció que me entendió a la perfección. Cuando se la terminó me la devolvió con una amable sonrisa y me dijo: shukrá. Le sonreí y me dirigí al autobús.
Tras el largo día en Fes, nos dirijimos a Volubilis, unas ruinas cerca de Meknés. 

Welcome to Morocco

Cuando nos bajamos del ferri el pasado 21 de marzo del 2012, no sabíamos los que nos esperaba.
 Todos estábamos cansados del trayecto, pero aún nos quedaban unas horas de recorrido hasta Meknés, nuestro primer destino. Nuestra primera parada con el autobús en el nuevo país fue en un área de servicio. Cuando estábamos en ésta, se nos acercó un perro sin pelo, desganado, y con aspecto de tener muchísima hambre. Recuerdo que le dimos lo que no queríamos de nuestra comida, pero a distancia, pues el aspecto que tenía no era de fiar. Estaba hablando con alguien y le expliqué el suceso, recuerdo que le dije:
- Ha sido súper fuerte, el perro no tenia nada de pelo! Tenía como unas escamas infectadas y todo...
Me sentía triste por aquel pobre perro, cuando Paco, uno de los conductores que nos acompañaban en aquella excursión me dijo:
- No va a ser el único impacto que te lleves en este viaje eh.
Era cierto, aunque no sabía con certeza lo que me esperaba en este lugar, me lo podía imaginar por como nos lo contaban en las noticias y libros. Me imaginaba muchísima pobreza, a la gente muy triste, sin ganas de nada, con niños a cuestas en las espaldas y algunos montados en burros. Lo que yo no sabía es que me llevaría una impresión totalmente diferente de Marruecos.

26/1/12

http://www.youtube.com/watch?v=jlPjnEXjgas
De nuevo.. Un conjunto de melodías me hace ver las cosas de distinta manera. Vuelvo a escuchar una canción que me hace pensar en todo, y me doy cuenta de las cosas... Que si... A estas alturas ya he perdido muchas, y he ganado otras, aunque no llenan los huecos. Que tengo más que asumido que soy bipolar. Que hay cosas que nunca se cumplen, que la gente promete y luego no saben cumplir. Que llegando año nuevo llegan nuevos propósitos que sabemos que casi nadie se toma en serio; sacar buenas notas, adelgazar, engordar... Yo me propongo año tras año el no perder a nadie, y nunca lo cumplo, y no porque no quiera, sino porque no se cómo hacerlo. Que puedo sonreír y llorar en menos de cinco minutos. Alegrar los días más tristes mas tristes de alguien haciendo gilipolleces sólo para que sonría. Porque me importa. Puedo... Puedo perder la cabeza cuando estoy entre la gente que me agrada con la música a todo volumen, bebiendo, sabiendo que celebramos algo, pasándolo bien, y guardando los segundos en fotos. Y... puede que en ese momento yo sea diferente, y no soy así siempre, sólo en esas circunstancias. No sé como lo hago , pero me olvido de todo por segundos, y me meto en un mundo en el que no existen los problemas, y es que supongo que he aprendido a evitar a éstos, para, por un momento disfrutar.  Que... Me he dado cuenta de que todo eso me transforma. En alguien que no tengo certeza si quiero ser.

7/1/12

.!.

Tan solo se trata de aprender. Como un niño chico aprende a atarse los cordones. Tienes que entrelazar las orejas del conejo y apretar bien fuerte. Sin dejar ningún cabo suelto. Una cosa tan simple como esta te enseña muchas cosas. Que no puedes andar por la vida con los zapatos desabrochados, que si no, te caes. Que las caídas pueden ser gordas. Y las heridas te hacen daño.
Asi que aprende amigo mío, que como dice el refrán " las mentiras tienen las patas muy cortas". Así que abróchate bien los zapatos, que tus mentiras tendrán que correr.